Nutrición y Dietética: «Comer solo fruta y verdura para bajar el turrón no es adecuado»

• Saltarse el desayuno «es demoledor» y se asocia al desarrollo de obesidad y resistencia a la insulina. «También dormir poco»
• Hay un cartel que estos días circula por whatsapp y que dice ‘tengo regordimientos’. Quien más quien menos ha ganado algunos kilitos a base de pantagruélicos festejos gastronómicos. El donostiarra Javier Salvador, director del Departamento de Endocrinología y Nutrición de la Clínica Universidad de Navarra, receta «sentido común» para no abrazar dietas que nos hagan perder ese peso de forma brusca «y que incluso pueden empeorar la salud». De una alimentación equilibrada, basada en la dieta mediterránea, y una actividad física razonable «obtendremos una situación nutricional y metabólica saludable».

– ¿Son preocupantes esos kilitos que nos han regalado los turrones, roscones y el champán?

– Es muy frecuente ganar de media dos o tres kilos. No son preocupantes en la medida en que suponen algo transitorio y se va reduciendo paulatinamente. No voy a decir que sea terriblemente horrible. También hay que tener en cuenta que cada persona es distinta, y por eso cada uno tiene que saber a qué riesgos se expone si hace excesos dietéticos. Me estoy refiriendo concretamente a las personas con un problema metabólico o nutricional previo, como por ejemplo una diabetes, en cuyo caso esa ganancia de kilos puede obligar a un ajuste del tratamiento farmacológico. Pero en términos generales no es preocupante si no supone el primer escalón de un aumento progresivo de peso.

«No hay ningún método que produzca la pérdida selectiva de masa grasa de forma rápida» «Si una persona tiene hipertensión y es obesa, lo primero es perder esa grasa» «La circunferencia de la cintura debe ser inferior a los 100 cm en hombres y 88 en mujeres»

– ¿Recomienda pesarse?

– Cada uno es el piloto de su salud y, en ese sentido, hay que controlarse un poco. Todo el mundo debe controlar la evolución del peso, no solo en Navidad, sino también en otras épocas. Subirse a la báscula de vez en cuando es una buena costumbre para tener una idea del peso saludable. Tampoco es que sea una cifra concreta, pero sí se trata de tener un índice de masa corporal correcto o que la circunferencia de la cintura, medida con una cinta métrica, sea en un varón inferior a los 100 centímetros y 88 en una mujer.