Psicotécnicos: La mejor forma de viajar en coche con mascotas y no recibir una multa sorpresa

/ / Noticias
  • El 50% de los conductores ha sufrido una situación de riesgo provocada por un animal de compañía.

 

Las mascotas se han convertido, en muchos casos, en un miembro más de la familia. E igual que si viajamos con niños tenemos que asegurarnos de utilizar los sistemas de retención más adecuados, los animales de compañía también están obligados a viajar en coche seguros, tanto por ellos como por el resto de pasajeros. Según la DGT, la mejor forma de llevar mascotas, si éstas son pequeñas, es en su transportín en el suelo del vehículo. Si la mascota es grande, lo mejor es colocar el transportín en el maletero en posición transversal a la dirección de la marcha. Preferible en este caso, para mayor seguridad, combinar este sistema con la rejilla divisoria. En cualquier caso, utilice siempre un sistema de sujeción adecuado.

La Ley sobre Tráfico, Circulación de vehículos a Motor y Seguridad Vial asegura que en el caso de llevar mascotas en el coche (son un pasajero más), los agentes de tráfico pueden inmovilizar todo aquel vehículo en el que se puede detectar posibilidades de movimiento y campo de visión; así como posición de los pasajeros o por la colocación de los «objetos» transportados (esos «objetos» pueden ser maletas, bultos o nuestro perro). Por ese motivo lo más recomendable es que nuestra mascota no vaya suelta por el vehículo. Según la DGT cuando viajamos con perros en el interior de un vehículo, se colocará un separador que impida que ocasione molestias o pueda ser causa de distracciones.

 

Incumplir las normas conlleva un castigo, así lo detallan desde el RACE, y en el caso del transporte de animales en un vehículo equivale a una multa de 80 euros -sin retirada de puntos- cuando viajan sin la adecuada sujeción para evitar que interfieran en la conducción. Esta situación hace referencia al artículo 18.1 del Reglamento General de Circulación y se considera una infracción leve. Y esta misma normativa, en el artículo 3, considera infracción muy grave conducir de forma manifiestamente temeraria, y grave hacerlo de forma negligente creando una situación de riesgo, algo que un agente de tráfico de la Guardia Civil puede considerar si el animal viaja en el regazo del conductor o totalmente suelto en el habitáculo. Estos casos conllevan multas de 500 euros y seis puntos en el carnet de conducir, o 200 euros, respectivamente.

Por lo tanto, mejorar nuestra seguridad y la de nuestros animales cuando viajamos en coche es prioritario. Un animal multiplica por 35 su peso en caso de accidente cuando se circula a 50 km/h. A pesar de que la mitad de propietarios de un animal no conocen las normas para su transporte, sí hay una gran mayoría (91%) que considera peligroso, tanto para el animal como para los pasajeros, llevar la mascota sin protección.

 

En el mercado se pueden encontrar diferentes sistemas de sujeción para que el viaje en coche sea más seguro tanto para los ocupantes como para los animales. Viajar con perros o gatos es lo más frecuente, pero también hay otros tipos de mascotas como roedores o pájaros. La Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Animales de Compañía (ANFAAC) estima que en España hay más de 13 millones de mascotas que viven en el 49,3% de las familias españolas. Así podemos protegerlos:

-Los arneses con doble enganche al cinturón de seguridad del vehículo son el sistema más recomendado para sujetar a los perros. El arnés con un único enganche resulta mucho más frágil porque el mosquetón se rompe con un perro de 22 kilos. Tampoco se recomiendan las correas que se enganchan al collar del animal por varios motivos: no retienen en caso de colisión, pueden provocar lesiones graves en el cuello del animal y permite movimientos libres de la mascota que pueden interferir en la conducción.

-En el caso de perros de gran tamaño, lo más aconsejable es llevarlo en el maletero utilizando rejillas divisorias para que el espacio del habitáculo quede totalmente separado del maletero. Para evitar que el animal se mueva por el espacio de carga pudiendo desestabilizar al vehículo, lo más seguro es combinar la rejilla divisoria con un trasportín adaptado al tamaño del perro.

-Para mascotas pequeñas la alternativa más segura es el trasportín situado dentro del habitáculo, pero no en cualquier sitio. El trasportín debe situarse sobre el suelo y detrás del respaldo de los asientos delanteros.

SUBIR